Reseña de la vivencia y experiencia de los afectados: personas traumatizadas informan sobre lo que les ayudo a superar sus traumas.

La buena noticia es: los corazones rotos pueden ser sanados de nuevo. El sol volverá a brillar. La luz penetrará la oscuridad más profunda. El alma puede respirar profundamente. Los prisioneros serán libres. Las cadenas romperán, las opresiones se quitarán. Las cargas se levantan. La vida se hace de nuevo posible. De esto estoy totalmente convencida. Lo he vivido por mí misma. Y conmigo otras personas que aquí comparten su historia con aquellos que necesitan más esperanza que el pan diario. Pues ¡hay esperanza! “Volverán a dar gritos de júbilo” – promete el sanador de corazones, aquel que también es llamado el “hombre de los dolores”.

Las personas que aquí comparten sus historias son reales. Para protección suya se han cambiado sus nombres. Solo yo, Christel (Crystal), escribo bajo mi propio nombre y también la consejera que se ha mostrado dispuesta a comentar algunos aspectos. Por supuesto, ella no puede asumir la garantía de sus recomendaciones, así como ninguno de nosotros. Solo podemos compartir nuestras historias y esperar que en algún lugar se encienda una pequeña llama en ti, que te dé un destello de esperanza para cobrar el valor que necesitas hoy.

Todos nosotros informamos sobre las cosas que nos han dado esperanza. Todos nosotros somos cristianos. Y todos nosotros sabemos que es el poder de Jesús resucitado (justamente el “hombre de los dolores”) que puede sanar los corazones rotos. El poder que regala vida nueva donde todo parece estar muerto; que hace que los desiertos florezcan. Pues Jesús, el Cristo, sabe lo que hace: él venció la muerte. Oramos juntos para que el secreto de su poder te toque y te despierte la curiosidad…

Es posible: tu darás gritos de júbilo. La alegría volverá. Bienvenido/a al país de la luz.

Christel/Crystal

PS: por recomendación de la biblia cada historia ha sido confirmada por dos testigos.

PSS: Jesús les dijo a sus discípulos: “Lo que ustedes recibieron gratis, denlo gratuitamente” (Mateo 10:8). Por eso esta página es sin ánimo de lucro. No se ganará ningún dinero, ni por medio de recomendaciones ni por la literatura u otros medios. Pido comprensión pues los correos electrónicos, como regla general, no serán respondidos.

Traducción: Diana Janke